Esta historia es muy interesante.
En 1971 un joven diseñador recién egresado de la Universidad del Sur de California había atravesado por última vez la puerta del instituto que marcó por años la línea entre las obligaciones y sus sueños.
Errol Gerson sabía que algún día se convertiría en un prestigioso diseñador y maestro. Lo que no sabía era cómo hacer para que el mundo comience a verlo.
Como la mayoría de los diseñadores que recién terminan sus estudios universitarios, lo primero que hizo fue aplicar a cuanto puesto de trabajo esté disponible en la ciudad. Necesitaba ganar experiencia, pero sobretodo, demostrarse a sí mismo de qué estaba hecho.
Envió solicitudes a más de 24 posiciones abiertas. De ninguna recibió una sola respuesta. ¿Qué estaba haciendo mal?
Errol estaba decepcionado, pero no rendido. En un momento, le pidió al decano de su universidad si podía mostrarle el curriculum que enviaban otros graduados de la carrera. Tal vez así podía identificar en qué estaba fallando y enmendar su error para conseguir su ansiada primera entrevista.
Pero lo que descubrió fue fascinante: todos los curriculums que tenía en frente eran iguales. Todas escritas en Times New Roman, todas con el mismo tamaño, todas en el mismo papel. Todas lo mismo.
Para este joven soñador de California, ese momento resultó ser de gran revelación. De repente tenía una idea para llamar la atención y sabía cómo ejecutarla. Pocas veces en la vida las buenas ideas y las herramientas para traerlas al mundo coinciden en una persona y Errol sabía que no había tiempo que perder.
Salió corriendo hacia la principal librería de la ciudad en busca de un papel que destaque por su calidad, textura y color. Después de un tiempo, se decidió por una fina y brillante hoja de la exclusiva compañía Strathmore.
Con mucha ilusión y entusiasmo en su mirada, le preguntó al encargado si podía cortar la lámina en hojas de 216 mm x 282.575 mm, ya que sólo podía permitirse comprar 5 hojas de esa calidad. El empleado, desconcertado con el pedido, no dudo en aclararle que ese tamaño de papel no existía. Por su parte, Errol no dudó un segundo en sonreírle para luego decirle: “Ahora existe”.
Con las 5 hojas en su poder, el paso siguiente era llevarlas a una imprenta. Allí conoció por primera vez la tipografía Verdana y fue amor a primera vista. Pidió explícitamente que la usen para imprimir su curriculum y así poder diferenciarse del resto de sus colegas que optaron por usar una tipografía Serif.
A la semana siguiente, pasó a retirar sus hojas grabadas y estaba encantado con el resultado.
Antes de retirarse del local, el encargado le preguntó si quería que le recorten esos 3.175 mm de más que tenían para que puedan entrar correctamente en un sobre de papel convencional. Errol fue tajante con su respuesta: “No”, y luego agregó: “De hecho, ¿podría imprimirme una franja de 3.175 mm en rojo y ubicarla a lo largo del encabezado de la hoja?”. El empleado asintió con la cabeza.
Con su nuevo curriculum bajo el brazo, empaquetó cuidadosamente cada hoja y las envió a la dirección de las empresas que quería aplicar. A los tres días recibió una llamada. Era el gerente de una importante compañía.
– ¿Sabes por qué te estoy llamando?
Errol sonrió.
– Si, lo sé. Tu equipo de Recursos Humanos te entregó 60 curriculums y sólo una se destacó por 3.175 mm.
Al final de esa semana estaba viajando a Nueva York para asistir a tres entrevistas de trabajo.
Marcar la diferencia fue lo que llevó a Errol a concretar 3 entrevistas en una semana cuando antes no había tenido ni una. No fue su experiencia pasada, no fue su talento, fue la diferencia.
Ahora, hay una buena y una mala noticia.
La buena noticia es que hoy reemplazamos el curriculum por el portfolio. Eso significa que contamos con un mejor dispositivo para diferenciarnos como diseñadores y destacar del resto.
La mala noticia es que muy pocas personas sacan provecho de su potencial para trabajar en mejores proyectos, negociar mejores salarios y ser fichado por buenas empresas porque no tienen un portfolio bien hecho.
Si no fuera por mi portfolio, no hubiese logrado que me contraten con una sola entrevista, recibir una oferta de trabajo que jamás imaginé que sería posible para mí y que empresas que siempre admiré me llamen para trabajar con ellos.
Bueno, lo mismo quiero para vos.
Estoy trabajando en una clase gratuita donde voy a hablar sobre cómo hacer de un portfolio el mejor aliado de tu carrera, y como Errol, crear oportunidades a través de la diferencia.
Si estás buscando hacer el cambio, es abajo.
Feliz jueves 👋