Hola, ¿cómo estás? Feliz año :)
Estoy de vuelta luego de unas semanas de desconexión total. Primera vez que lo hago y que se lo recomiendo con los ojos cerrados a cualquiera que necesite obtener claridad en su vida.
Una de las tantas conclusiones a las que llegué durante este experimento fue la siguiente:
Es muy fácil perderse cuando convivimos con el ruido de miles de voces diciéndonos qué hacer y cómo hacerlo.
Nos tocó vivir en un mundo en dónde todos luchan por nuestra atención. Y aunque eso no sea necesariamente malo, es nuestra responsabilidad aprender a quién se la entregamos.
Foco y compromiso a largo plazo son los principales ingredientes para concretar cualquier proyecto y alcanzar cualquier objetivo. Ambos recursos son finitos. Por eso es tan importante ser más conscientes que nunca de a dónde estamos poniendo el foco y a qué le estamos regalando nuestra atención.
Una de las mayores revelaciones que tuve el año pasado fue darme cuenta que definirme por los resultados que obtenía en el presente limitaba profundamente mi compromiso a largo plazo.
Si enviaba un correo y no obtenía el impacto que esperaba, me frustraba y dudaba de la continuidad de mi newsletter.
Si lanzaba un curso y no tenía la recepción que quería, lo daba de baja en vez de iterarlo.
Muchas personas caemos en esta trampa y en consecuencia cometemos dos gravísimos errores:
Eliminamos cualquier posibilidad de crecimiento y prosperidad para el proyecto.
Damos de baja el proyecto y empezamos de cero con las mismas expectativas que nos llevarán a dejarlo si no tiene los resultados inmediatos que esperamos.
Me parece importante que entiendas que por más que te hagan creer lo contrario, es imposible predecir el resultado de algo sin antes sacarlo al mundo.
Esa frase que dice que la mejor manera de predecir el futuro es creándolo es muy cierta. Aplicado a nuestros proyectos y emprendimientos, la mejor manera de alcanzar o superar un resultado es a base de iteración constante.
Lanzamos algo al mundo.
Obtenemos información valiosa sobre eso.
Ajustamos lo necesario con la claridad que solo podíamos obtener si compartíamos nuestro trabajo con el resto.
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Esta es la mejor época del año para invertir en tu marca personal y en un portfolio que le hable directamente a las personas con las que te gustaría trabajar. Tengo un curso dedicado exclusivamente a eso que estará aumentando su precio en 7 días. Asegura tu lugar acá.
En el correo de la semana que viene estaré anunciando algo que hace más de 6 meses vengo trabajando y que me tiene muy entusiasmado. Mi sugerencia: que pongas una alarma para que no se te olvide abrir tu casilla ese día.
La mente es muy poderosa
Nuestra mente es una super computadora.
Una persona promedio puede procesar hasta 74 GB de información al día.
Esto equivale a…
Ver los 73 episodios de la serie Game of Thrones
Escuchar toda la obra compuesta por Vivaldi (235 hr) y Mozart (240 hrs)
Leer cada uno de los artículos de Wikipedia 3 veces.
Hace tan solo 500 años atrás, 74 GB de información significaba todo lo que una persona altamente educada podía consumir en toda su vida a través de libros e historias. Hoy podemos consumirlo en un fin de semana.
Al igual que las computadoras, nuestro cerebro posee una cantidad limitada de RAM (Random Access Memory) que influye significativamente en nuestra capacidad de rendimiento..
Cuantas más ventanas abiertas tenemos, cuantos más programas corremos en simultáneo y cuantos más procesos ejecutamos, menor rendimiento tendrá la computadora.
Lo mismo sucede con nuestro cerebro.
Cuanto más distribuimos nuestra atención y enfoque, menos rendimiento tendremos para ejecutar correctamente una tarea.
El consumo excesivo de redes sociales y contenidos sin propósito son los principales aspiradores de atención en nuestra era.
Pero también lo somos nosotros mismos…
Perdiéndonos en lamentos y arrepentimientos del pasado
Preocupándonos por el futuro
No sabiendo priorizar lo que es importante para nosotros
Poniéndole demasiado peso a las opiniones ajenas en vez de trabajar en la vida que nos gustaría tener.
Resulta difícil identificarlo en el día a día, pero acá estoy para decirte que todos esos pensamientos también son responsables de que tu atención y enfoque se diluyan hasta vaciarse.
Si quieres recuperar el control de tu energía y atención deberás aprender a:
Identificar lo que es verdaderamente importante para vos y descartar todo aquello que hoy no te sume.
Comprometerte a largo plazo con eso que te importa.
Eliminar cualquier estímulo o distracción que te saque de tu estado creativo.
La dopamina es una sustancia extremadamente poderosa para la mente.
La dopamina influye en nuestro destino. Podemos aprender a liberarla cada vez que logramos progresar en nuestros objetivos o lamentarnos en el futuro por haberla perdido con micro-dosis de placer inmediato.
¿Y por qué te digo esto?
Cuando tomé la decisión de trabajar de manera independiente tenía la creencia de que más proyectos eran sinónimo de más libertad y estabilidad para mi vida y negocio.
Esto me llevó a poner la atención en el volumen de proyectos y no en el precio que estaba cobrando por mis servicios. En consecuencia, trabajaba mucho, mi atención estaba completamente dispersa y cobraba poco.
Tuve que pasar por una espantosa experiencia de burn out para darme cuenta que algo estaba roto y que tenía que reiniciar mi estrategia.
Esa decisión me llevó a poner la atención y foco en cosas que había descuidado hasta entonces:
Aprender a diseñar ofertas de alto valor para mis clientes
Dejar de posicionarme como un diseñador más
Trabajar en mi marca personal
Comenzar a dirigir toda mi comunicación al tipo de cliente con el que quiero trabajar
Y a los pocos meses comenzaron a llegar las oportunidades que estaba buscando:
Menos proyectos
Más ganancias
Muchísimo menos estrés
No podemos esperar diferentes resultados aplicando las mismas técnicas que nos llevaron a desear otra realidad.
Tu atención y foco está disperso porque a falta de dirección decides distraerte con dopamina barata en forma de videos y contenido basura diseñado para entretenerte.
Lo que pocas personas saben es que aplicando los sistemas y herramientas correctas por un período sostenido de tiempo es posible materializar una vida próspera, creativa y estable.
Por eso es importante poner las voces que te distraen a un costado y mantener fija la atención en tu realidad deseada. Cuando eso suceda, las respuestas comenzarán a llegar por si solas.
La vida es un videojuego
Esto ya lo mencioné en un correo anterior pero me parece importante recuperarlo:
Cuando empezamos un nuevo juego lo primero que sucede (directa o indirectamente) es que ingresamos en una fase de aprendizaje para que podamos familiarizarnos con su entorno, sus reglas, objetivos y herramientas necesarias para ganarlo.
Cada nivel del juego requiere de diferentes habilidades y comportamientos para alcanzar su objetivo. Dicho de otra manera: si eres un principiante jugando en el nivel más complejo del juego terminarás abandonando por falta de motivación.
Para llegar a la recta final del juego, la manera más sana y predecible es evitando saltear etapas y aprovechando el nivel en el que te encuentras como una oportunidad para desarrollar las habilidades necesarias para avanzar.
Y en la vida es bastante parecido:
Para ganar el juego necesitarás aprender, fallar, practicar y mejorar para expandir tu experiencia a lo largo del camino.
Cómo reiniciar tu vida en 2024
Siempre que me siento perdido o desorientado con mi vida acudo a una lista que me aporta claridad y dirección en mi toma de decisiones. Esta misma herramienta es la que hoy quiero compartirte.
Mi recomendación es que para completar este ejercicio tengas un papel y lápiz en mano (nada de computadoras ni dispositivos electrónicos) y que busques un lugar tranquilo, despojado de cualquier distracción.
Ahora si. Manos a la obra ↓
1. Define un objetivo y mantiene una obsesión inquebrantable por alcanzarlo
Si es muy importante para tu vida, requerirá de toda tu atención, energia y corazón para alcanzarlo.
Pero también es necesario entender que nada sucede de la noche a la mañana. Por eso, es importante que definas un objetivo que sea razonablemente posible alcanzar en el período de un año.
Solo tu puedes saber cuál es ese límite. Y sea cual sea, está muy bien.
2. Sé consciente de los enormes resultados que llegan a través de pequeñas y cotidianas tareas
James Clear, autor del libro Atomic Habits, nos dice que el objetivo es el resultado, mientras que los sistemas son la colección de hábitos que nos llevarán a el.
Ningún resultado se obtiene a base de tareas aisladas e intermitentes.
Identifica cuáles son las pequeñas tareas que tendrás que integrar en tu día a día para llegar al resultado deseado.
3. Desarrolla un enfoque extraordinario
Como vengo diciendo, la dirección de tu atención y enfoque determina los resultados que tendrás a futuro.
¿Qué cosas están absorbiendo gran parte de tu energía y atención?
¿Qué podrías eliminar o reducir para estar más enfocado?
4. Identifica tu “por qué”
Este punto es quizás el que más tiempo te puede llevar y está bien que sea así.
Todos tenemos algo que nos moviliza más allá del dinero y los logros. Generalmente está muy atado a nuestros valores, perspectivas y en definitiva a un cambio positivo que queremos dejar en el mundo.
Si nunca escuchaste hablar de la palabra Ikigai y mucho menos te detuviste a hacerlo, te recomiendo muchísimo que lo hagas.
El filosofo Niestzche lo dijo mejor que nadie:
“Quien tiene un porqué para vivir, encontrará casi siempre el cómo”
5. Invierte tiempo y energía en educación
Muchas personas esperan un resultado antes de invertir en educación.
Otras creen que no necesitan invertir en educación.
Pero unas pocas invierten en su educación y al hacerlo logran multiplicar sus resultados en mucho menos tiempo.
La mayoría cree que no tiene sentido invertir en mentorias, programas y cursos porque toda la información ya está disponible en internet y ese es exactamente el problema: todo está en internet.
Cuando invertimos en educación lo que hacemos es ahorrar volúmenes de horas de vida gracias a una persona que logró despejar el ruido, separar lo valioso y sintetizar lo que verdaderamente le funcionó para alcanzar el mismo objetivo que estás buscando.
No solo eso, también estamos pagando por un orden coherente de la información y así evitar errores que de haberlo sabido no hubiesen pasado.
Nunca escatimes en educación. Si algo es importante para vos, vale la pena la inversión y el tiempo.
6. Rodéate de personas que estén en la misma que vos
El camino es lento y por momentos se vuelve solitario.
En el proceso vas a dudar una y mil veces si es lo correcto.
Rodearte de personas que están viviendo lo mismo que vos es lo mejor que podes hacer para evitar la soledad de la incomprensión.
Y si no tienes a nadie de tu círculo que esté atravesando por un proceso similar, no tengas miedo de acercarte a alguien que admires o sientas que puede ayudarte. En la mayoría de los casos, estarán encantados de hacerlo.
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De ahora y hasta que termine el año solo quiero pedirte una cosa:
Recuerda todas esas ilusiones y objetivos que hace un mes te prometiste cumplir en 2024 y abrázalas con fuerza.
Literalmente estás a una decisión de cambiar tu vida.
Un compromiso.
Un cambio a la vez.
Todos los días.
Porque por mucho tiempo sentirás que no pasa nada.
Hasta que un día pasa todo.
Te mando un abrazo,
Agustín
Un episodio random del podcast
Una cita para reflexionar
“El coraje es más estimulante que el miedo y, a la larga, es más fácil. No tenemos que convertirnos en héroes de la noche a la mañana. Sólo un paso a la vez, enfrentando cada cosa que surja, viendo que no es tan espantoso como parecía, descubriendo que tenemos la fuerza para mirarlo fijamente.” Eleanor Roosevelt
Quiero conocerte
Si digo que este será tu año es porque estoy decidido a acompañarte para que eso suceda. Para entender mejor cómo hacerlo, armé un pequeño formulario. ¿Me ayudas a completarlo? Click aquí para participar.